Warning: Last items in stock!
Availability date:
Nota Importante: Acokaia recomienda siempre elegir una talla superior a la actual del niñ@
Tipo de producto: UNISEX
Cuello Redondo
Manga Corta
100% Algodón
Lavar del revés
No usar secadora
Tipo de producto: UNISEX Cuello Redondo Manga Corta 100% Algodón Lavar del revés No usar secadora
Tipo de producto: UNISEX Cuello Redondo Manga Corta 100% Algodón Lavar del revés No usar secadora
Camiseta El juego del Calamar Niño En Acokaia te ofrecemos la sudadera de la serie de moda "El Juego del Calamar" para que disfrutes vistiendo de...
Camiseta Baby Shark Niño Tipo de producto: UNISEX Cuello Redondo Manga Corta 100% Algodón Lavar del revés
Camiseta Kylo Ren Niño Unisex Camiseta en material 100% polialgodón transpirable de 140g/m2 con textura de algodón. Transpirable 100% Poliéster 140...
Tipo de producto: UNISEX Cuello Redondo Manga Corta 100% Algodón Lavar del revés No usar secadora
Haga clic aquí para dejar un comentario
La Camiseta “Nada Puede Malir Sal” para niños es perfecta para los peques que no paran de meter la pata… ¡y que encima lo hacen con gracia! Esta prenda convierte el error ortográfico más famoso en una declaración de humor, ideal para niños con chispa, padres con paciencia y profes que ya han visto de todo.
Con un diseño limpio y la frase en grande, esta camiseta no solo arranca carcajadas, sino que también enseña algo muy importante: reírse de uno mismo es un superpoder. Es el tipo de prenda que hace que todos en el cole (incluso la profe de lengua) suelten una sonrisa.
Hecha en algodón suave y resistente, esta camiseta divertida para niños está diseñada para soportar carreras, manchas de merienda y lavados intensivos. Su tejido es ligero, transpirable y muy cómodo para el día a día. Porque si vas a hacer travesuras, mejor con una camiseta que te acompañe bien.
Ideal para cumpleaños, fiestas o simplemente para alegrar un día cualquiera. Esta camiseta con frase graciosa infantil es un regalo original que combina humor, practicidad y estilo. En Acokaia sabemos que la infancia es el mejor momento para aprender a reírse de todo, incluso del abecedario.